“A veces me pongo a pensar las cosas que fui perdiendo. No está bueno pensar en eso. Fueron doce años que me perdí de viajes, cumpleaños, trabajos. Todo eso me afectó y me afecta”, se sinceró, entre lágrimas, y continuó: “El tema monetario, por la cantidad de medicación que tengo que tomar, no estoy trabajando tampoco... Mucho tiempo callé porque me daba vergüenza hablar de esto. Hice catarsis. Esta bueno sacarlo y que la gente sepa”, y por último hizo hincapié: “Me encanta vivir. Quiero vivir. Pero nunca sabés los caminos”.